ágoradelpensamiento

En el ejercicio y gestión de la venta: la comunicación y la psicología son necesarias y claves ante nuestros interlocutores, tanto a nivel del conocimiento personal del cliente como de la imagen y transmisión mental positiva que les demos a percibir. Además de la credibilidad que podamos aportar mediante nuestros productos o servicios como garantía y fortaleza de los mismos.
Si la venta es convencer y generar confianza. A través de la comunicación y la psicología debemos transmitirla y ganárnosla. Es el genuino génesis conceptual y «abc» de la venta.
Las relaciones humanas son parte prioritaria del éxito o el fracaso en los procesos comerciales. La interacción comunicativa de relación nos proporciona la información oportuna decisoria para poder detectar las necesidades de nuestros clientes, aportándoles las soluciones que demandan.
La psicología en la venta nos sirve de herramienta exploratoria necesaria para desarrollar y crear un lenguaje propio y adecuado que llegue al cliente (feedback), dotándole de la seguridad y tranquilidad personal.
Ya que en los procesos comerciales, la comunicación y la psicología son prioritarias, básicas y determinantes, aprovechemoslas al máximo. Ese ha de ser nuestro reto de actuación para ponerlas en uso y llevarlas a cabo en toda su potencialidad.
Conocer a nuestros clientes es el primer paso en la acción de la venta como aval de triunfo y profesionalidad comercial.
Emprendamos un camino misterioso de enigmas y empecemos a vender. Los clientes no esperan.

Uno de los principios claves y primordiales en la venta: «No hay una segunda oportunidad para poder dar una primera impresión». Imagen y comunicación son el «abc» determinante y clave en cualquier proceso de venta. Por ello, si la venta es la interacción humana entre personas, la comunicación y la psicología son básicas como complemento y aportación junto a las técnicas de ventas y conocimiento del producto o servicio en el desarrollo de las estrategias comerciales que se lleven a cabo y nos ayuden al éxito de las mismas.
Saber vender es el camino a seguir para poder empezar a vender y no caer en el fracaso y la frustración ante las dificultades, el desánimo y la soledad de la venta que conlleva. Mientras que la perseverancia ha de ser nuestro mejor aliado y compañero de viaje en el día a día frente a las vicisitudes que tiene el mundo de la venta. La fortaleza mental es clave en la profesión comercial. Con lo cual, creer en uno mismo es el primer paso para que los demás empiecen a creer en ti y puedas conseguir lo que te propongas. A partir de ahí, has de empezar a vender. Es el principio de la venta. Haz que tenga un buen final y empieza a vender.