Con la que está cayendo hablar de los políticos parece que no es el mejor momento, pero creo que es necesario y conveniente hacerlo.
La actividad política como tal es un ejercicio noble de servicio público y de aportación a la sociedad en su transformación y mejora del bienestar de sus ciudadanos. A partir de ahí y sin entrar en profundidad en las medidas de regeneración política fruto de la corrupción que padecemos sabemos que son necesarias reformas que vayan desde: mecanismos de control de los partidos, fundaciones, tipificación de delitos, privilegios.
Centrándonos en la remuneración económica que han de percibir los políticos por su actividad de trabajo considero que los sueldos de los políticos deberían de ir en función de la Administración Pública donde ejerzan su actividad, sea: la Administración Local, Autonómica o General del Estado y acorde al funcionario de carrera de más alta retribución económica en su escala de la Administración correspondiente y al tope máximo que perciba.
¿Son insuficientes los sueldos de los políticos?
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